Un día… como cualquier otro

Permítanme contarles hoy una serie de hechos muy distintos, heterogéneos y aparentemente no vinculados que, a riesgo de que el lector se confunda, trataré de conectar sobre el final de la nota.

  • Con horario de oficina y una falta de tiempo casi endémica, tendemos a almorzar fuera de casa. A veces, según nuestro tipo de trabajo, cenamos también afuera con clientes, proveedores, socios, colegas o incluso con amigos y familia. Cocinamos mucho menos nuestra propia comida y utilizamos más los restaurants, tiendas, bares, locales de comida rápida, etc.
  • Al regresar a casa de nuestro trabajo, ya bastante cansados y con menos energía, podemos optar por llamar a un servicio de comida con envío a domicilio. También solemos comprar algo ya hecho en el mismo supermercado o en una rotisería. O bien nos ponemos a cocinar algo rápido, sin demasiada elaboración porque el tiempo es escaso y valioso.
  • El supermercado o hipermercado, que es la fuente de suministros por excelencia de la familia moderna, nos ofrece una variedad de productos procesados, ultra-procesados, congelados, enlatados, desecados, pre-cocidos, envasados al vacío, en contenedores de plástico, de aluminio o de cartón impermeabilizado con otro recubrimiento (plástico…).
  • La fruta y la verdura aprendió a madurar adentro de un camión de transporte. Además las variedades genéticas han sido seleccionadas cuidadosamente por la conveniencia para su logística, para su distribución y para que tenga un mejor aspecto visual en la góndola.
  • Adicionalmente, durante la siembra, desarrollo y empaque de los diferentes cultivos se usan abundantes agroquímicos para controlar malezas, insectos, ácaros, hongos, virus y para poder aumentar el rendimiento económico de todo el proceso, desde el campo a la boca expendio.
  • El pescado que tanto apreciamos por sus virtudes nutricionales, acumula hoy también metales pesados, dioxina, pesticidas clorados y micro-plásticos, porque usamos los océanos como un vertedero, particularmente con aquello muy difícil o muy costoso de reciclar, limpiar o depurar.
  • Para preparar la «comida moderna» que consumimos, usamos todo un arsenal de productos químicos: conservantes, estabilizantes, edulcorantes, bacteriostáticos, antibióticos, aromatizantes, colorantes, emulsionantes, espesantes, anti-espumantes, anti-aglomerantes, acidulantes, buffers, etc. También reemplazamos los productos caros por otros más baratos como el jarabe de maíz, la albumina bovina, grasas trans, aceites hidrogenados, huevo y leche en polvo. Le agregamos mezclas de azúcar con sal como “mejoradores de sabor” y, de paso, lo volvemos un poquito más adictivos para el paladar.
  • Aceites, azucares, almidones y harinas refinadas que son blanqueadas químicamente, sumando otro poco de artificialidad al repertorio con cada vez más y novedosos riesgos para la salud.
  • El exquisito platillo se arma en casa con todos estos productos y, muy probablemente, se sobre-cocina en aceite hirviendo o se le introduce en un microondas.
  • Para beber tenemos bebida carbonatada artificialmente con hasta un 30% de azúcar refinado y otros tantos químicos adicionales. La alternativa «saludable» es el mismo constructo pero con una dosis superlativa de algún edulcorante de dudosa o nula contribución a la salud. Caso contrario, algo de alcohol en sus diferentes variantes, para la depresión de su médico de cabecera.
  • Si toma alguna que otra medicación de manera crónica, es otro químico adicional a sumar en este complejo cóctel que va a ir directo a fermentar en el ya muy trastornado micro bioma intestinal.
  • ¿Qué tanto más me puede hacer un cigarrillo? Adelante. Como sea el aire que respira también contiene polución, metales pesados y gases de los combustibles fósiles.
  • ¿Desea un chocolate también? Al menos si es chocolate amargo y muy puro, le puede servir para no deprimirse.
  • A estas alturas estamos listos para ir derecho al sillón, poner la TV o procrastinar con videos en Internet cerrando el círculo con algo de sedentarismo.
  • Si lo desea, puede chequear sus mails y traerse algo del estrés laboral a casa. Su calidad de sueño esta noche estará sujeta al tenor de los mensajes que reciba del pesado de su jefe o amenazado por la luz azul de la pantalla de su laptop o Ipad (sí, le altera la calidad del descanso). 
  • Para cerrar con todos estos hechos dispersos e inconexos quiero mencionar ahora a las principales causas globales de muerte según la OMS: Cardiopatía isquémica, Accidente Cerebrovascular, Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica, Enfermedades de las vías respiratorias, Cáncer (distintos tipos), Diabetes y Nefropatías.

Bien, como habrán notado a estas alturas, los “hechos dispersos e inconexos” conforman el denominado “estilo de vida moderno”, mal que nos pese.

Este “estilo de vida moderno” sostenido a lo largo de los años acarrea cifras muy altas de obesidad, diabetes, sobrepeso, cáncer, infarto, ACV, trastornos auto-inmunes, alergias, problemas metabólicos, inflamación crónica, etc.    

Todos somos presa de algunas o de muchas de estas amenazas, riesgos y descuidos que socavan paulatinamente nuestra salud y bienestar.

La única forma de prevenir es informarse, conocer, entender, cambiar hábitos y cuidarse más.

Intentemos tomar conciencia, primero, y actuar en consecuencia después.

Sostener en el tiempo cambios saludables de este tipo no es sencillo, pero sí es posible. Está en juego su bienestar y su salud.

Nota del Lic. Leandro Javier Pérez Surraco

Si a nivel personal o dentro de tu grupo de trabajo buscas mejorar tu calidad de vida junto con todas aquellas dimensiones que te conducen al bienestar, puedes escribirnos a CONTACTO Bienestar Resiliente.

Bibliografía Complementaria

Frequent consumption of meals prepared away from home linked to increased risk of early death – ScienceDaily

Chemical risks associated with ready‐to‐eat vegetables

Contaminants in Fish: Washington State Department of Health

Microplastics in the Ocean – PubMed (nih.gov)

7 «Toxins» in Food That Are Actually Concerning (healthline.com)

Common food additives and chemicals harmful to children – Harvard Health

https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pmc/articles/Soft Drink Consumption on Nutrition

https://pubmed.ncbi.nlm.nih.gov/Physiological and health implications of a sedentary lifestyle

How Blue Light Affects Sleep | Sleep Foundation

https://www.who.int/es/news-room/fact-sheets/detail/the-top-10-causes-of-death

Deja un comentario